La directora Blerta Basholli trae a la 66 edición de la Seminci su Obra Prima, tras haberse presentado en varios festivales, y haber conseguido numerosos premios. Hive es un film dramático, basado en un hecho real, en el Kosovo de la postguerra. Dónde pone como foco principal, el papel de las mujeres que quedaron viudas, dentro de un entorno rural, devastado por la guerra y demasiado patriarcal. Para poder llevar a su realidad, contó con el siguiente equipo de actores: Yllka Gashi como Fahrije; Çun Lajçi como Haxhi; Aurita Agushi como Zamira Kumrije; Hoxha como Nazmije; Adriana Matoshi como Lume; Molikë Maxhuni como Emine; Blerta Ismaili como Edona.
Blerta Basholli consigue en su primer largometraje, encontrar la aguja en el pajar, dotándola de un potencial muy fuerte, cara a la galería de próximos trabajos. El film va más allá de una mujer que perdió a su marido, sino de ir quitando vendas sobre muchos tabúes que existen el pueblo dónde ella vive junto a sus dos hijos y su suegro. El cual no se hace a la idea de haber perdido a su hijo y que, es uno de los personajes que más van avanzando dentro de la trama del film.
Fahrije es una corredora de fondo que tiene que superarse todos los días, luchando duro, para poder sacar a su familia adelante. La incomprensión de sus vecinos, los cuales no se meten en su propio pellejo, hace que tenga conflictos con los hombres del pueblo. Los cuales no ven con buenos ojos las acciones de Fahrije. La transformación de Yllka como Fahrije es totalmente impresionante. Ha hecho que el papel sea su papel, con una interpretación totalmente acertada. Sin duda es otra de las damas que están cerca del premio a la mejor actriz de esta edición.
Nota:8/10.
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