Perdiendo el este, ese pinchazo taquillero que solo llega a entretener

Hace 4 años llegó a las pantallas de los cines, "Perdiendo el norte", una comedia sin más pretensiones que hacer pasar un rato agradable, encabezada por un buen elenco de cómicos, ante un drama que era muy real. Los jóvenes universitarios se iban hacia Europa del Norte para poder desarrollarse profesionalmente, ante una crisis muy aguda que estaba viviendo el país, y que hoy en día aún seguimos sufriendo sus coletazos a niveles de empleo estable y digno. El film que podría haber jugado un papel más importante dentro de tal crítica, se basó más bien en la complejidad de las personas a la hora de relacionarse ante una situación que nunca habrían vivido y a miles de kilómetros de sus casas. La publicidad que dieron al film hizo que se convirtiera en un fenómeno en taquilla, originando una secuela en la televisión, dicha serie, "Buscando el norte", llegó a pasar por más pena que gloria, siendo cancelada en su primera temporada, debido a las bajas audiencias. Ahora regresan con un segundo film, viajando hasta el país asiático de China, con un elenco de actores que no mostrará más allá, de lo que fue su primera parte, y que poco más llega a servir dicha secuela. Para esta nueva aventura vuelven a contar con Julián López, Miki Esparbé, y Younes Bachir, estos tres viejo conocidos volverán a encontrarse en esta nueva aventura, con tres propósitos diferentes, pero con un mismo objetivo, sobrevivir en la capital China. Junto a ellos está Silvia Alonso, la modelo Chacha Huang, Edu Soto, Fele Martínez actor que aparecería en la serie; pero con otro rol al de la secuela, Leo Harlem, Carmen Machí, o el cameo de Javier Cámara.

El director Nacho G. Velilla deja el testigo de la secuela al director debutante Javier Caballero, el cual se hace cargo de su primera larga duración, teniendo en su haber el mini film "Cites". Su secuela llega a llevar el mismo ritmo que en la primera, cómo buscarse la vida a través de encontrar esa oportunidad laboral, y que al mismo tiempo no tengan que regresar a sus casas fracasando. Del reparto solo puedo decir que están excelentes, hacen un gran trabajo dentro de un guion que está dirigido a la comedia, en ese punto llegan a bordarlo; pero al film le falta mucho más ritmo a la hora de construir una realidad que llegan llevando las personas que tienen que irse de su país, para poder encontrar un futuro muy lejos de su hogar. Mostrando contrastes de cómo la cultura china entra dentro del comercio español, y cómo los españoles se quieren hacer un hueco en el país asiático. Como de alguna forma se tiene que utilizar entre las personas, ya sean por parejas convenidas, o por visados legales, estos llegan a aprovechar una ocasión, llegando a perder totalmente la situación.

Braulio es un químico muy torpe al que está a punto de caducar su visado en el país, y Xiao es una mujer mayor de 25 años, la cual está calificada como mujer sobrante. Ellos son dos personas que se llegan a necesitar, llegando a jugar con los sentimientos de cada uno, dentro de una relación que perderán totalmente las riendas, llegando a surgir una chispa entre los dos. Entre todas las meteduras de pata de Braulio, este hará que Xiao llegue a su límite, y sobrepase el motivo por el cual eligió al más tonto de todos los hombres para poder demostrar a su padre que no es una mujer sobrante, y así no es el juguete de un matrimonio concertado. Esta extraña pareja hará que las personas que les rodeen vean también una oportunidad para poder realizar sus sueños en el país asiático; aunque sea bajo una mentira, y la manipulación.

Perdiendo el este ha entrado en taquilla como la serie de Buscando el norte, con más pena que gloria. Dentro de un film que cumple en su objetivo de entretener y con unas actuaciones, en las que nos dejan ver los grandes cómicos que llega a tener el país.

Nota: 6/10.