Tu hijo inaugura la 63 SEMINCI con una historia de venganzas

Dos años después de haberse introducido en el mundo del terror con el film Inside, el director sevillano Miguel Ángel Vivas regresa a las grandes pantallas con un drama protagonizado por el actor José Coronado. Tu hijo es una nueva vuelta de tuerca a lo que es el "padre coraje", un drama donde un padre ve como la justicia no hace nada por castigar a los culpables de la agresión a su hijo, y este mismo se toma la ley por su mano.
El actor José Coronado se mete en la piel de Jaime Jiménez, un médico cirujano que atiende a los niños de un hospital de Cádiz. El cual es muy cuidadoso con su familia, su mujer y sus dos hijos, donde un día se va a dar cuenta que en realidad son unos perfectos desconocidos para él. Marcos, su hijo mayor se verá dentro en una pelea donde le dejaran totalmente en estado vegetativo. Con muy pocas posibilidades de poder salir mejor de su estado, su padre caerá en una profunda crisis personal, donde su mente le hará pasar por un verdadero calvario, un horrible infierno del cual solo le pide una cosa, venganza ante la pasividad de unos amigos que estarían con él en la discoteca la noche que ocurrió todo los sucesos, una novia que huye y que atestiguan que ya había roto con la relación sentimental con su hijo, y una hija que se mantiene prudente buscando realmente la verdad de todo lo sucedido. Todos ellos forman ese círculo vicioso por el que Jaime no se quedara quieto y llorando por su hijo Marcos; pero ¿existen en realidad los malos muy malos y los buenos muy buenos? Esto no es una película de Walt Disney para niños...

Si hay algo con lo que me quedo es con las actuaciones de José Coronado y como la joven actriz Ester Expósito defiende su papel dentro de la película, haciendo una gran intervención. Como mantiene un ritmo mostrando la unión entre padre e hijo, dando ese punto de credibilidad en todos sus hechos, y aún más, como los padres, de los hijos que están metidos dentro de este asunto, también actuaran de una forma parecida contra Jaime. Ese final que te deja con una seria pregunta y un desenlace que te lo puedes llegar a imaginar, aunque en cada mente de toda persona hay un mundo diferente, y es que como siempre he dicho: verdades hay muchas, tantas como ombligos, y realidad solo existe una. ¿Podria afrontar Jaime la realidad de su hijo?

Por el contrario no me ha gustado en nada el poco trato que tiene con los protagonistas que acompañan al médico hacen como si fuera un auténtico monologo, aunque tiene un gran abanico con el que jugar, y ese reparto lo merecía.

Nota: 6/10.