Antes de que se empiece a visualizar la película de "Buscando a Dory". Los estudios Disney-Pixar, abren el telón con un cuento creado por el animador Alan Barillaro, el cual se estrena como director con el cortometraje. Para los estudios de animación de Disney-Pixar. Bajo el enfoque de una cría de gaviota, luchando entre la resaca de las olas que rompen en la playa. Piper, va más allá, es un sinónimo de superación, de aprendizaje, dentro de una vida que acaba de empezar. Como al principio, ver a la cría pedir la comida, y en ese momento su madre, darle un empujón para que pueda crecer por sí misma, ante los baches que se irá encontrando en la orilla de la playa. Dejando una historia que bien podría llegar a valer el peso de una película por la trama, y la moraleja, que conlleva en si misma.
El corto que sin palabras, con tan solo los sonidos reales de los aves. Te llevará a que comprendas, que los retos más importantes en nuestras vidas, son los que al final cuestan mucho más, cuestan despegar de una vida que creías que podría ser para siempre; pero que se va cambiando al paso del tiempo, como la vida de la pequeña cría de gaviota. Aquí es donde realmente manda el coraje, o llámalo el instinto de supervivencia. Sin duda, en muchas ocasiones, desde un pequeño ser, se puede llegar a aprender mucho más de lo que uno piensa.Por eso la casa Disney siempre ha expuesto sus enseñanzas, desde los detalles más pequeños, y desde los personajes más singulares que te puedas imaginar, ya sea un pequeño boy-scout, un robot que irá limpiando la superficie de un planeta desabastecido, unos pequeños juguetes, o una pequeña gaviotilla.
Nota: 9/10.
El corto que sin palabras, con tan solo los sonidos reales de los aves. Te llevará a que comprendas, que los retos más importantes en nuestras vidas, son los que al final cuestan mucho más, cuestan despegar de una vida que creías que podría ser para siempre; pero que se va cambiando al paso del tiempo, como la vida de la pequeña cría de gaviota. Aquí es donde realmente manda el coraje, o llámalo el instinto de supervivencia. Sin duda, en muchas ocasiones, desde un pequeño ser, se puede llegar a aprender mucho más de lo que uno piensa.Por eso la casa Disney siempre ha expuesto sus enseñanzas, desde los detalles más pequeños, y desde los personajes más singulares que te puedas imaginar, ya sea un pequeño boy-scout, un robot que irá limpiando la superficie de un planeta desabastecido, unos pequeños juguetes, o una pequeña gaviotilla.
Nota: 9/10.
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