El oscarizado director británico, Sam Mendes regreso de nuevo, para volver a filmar una nueva aventura, del agente de los servicios secretos británicos, el MI6. Tras ya haberlo retratado en la anterior ocasión, "Skyfall", llegando a tener una conexión entre estás, por un motivo que, últimamente le ha movido más al agente 007, la venganza. Con, "Spectre", va camino de hacer una trilogía dentro de la larga saga que han creado al rededor del agente 007. Donde Daniel Graig vuelve a interpretar a James Bond, considerado como el mejor actor que ha interpretado al agente; cosa que no comparto, tenía más brillo Pierce Brosman, encarna por cuarta vez; y, si los estudios no se han llegado a tomar sus declaraciones a pies puntillas, le veremos en una quinta entrega. Siendo Spectre un film donde se aleja de los cánones conocidos por el intrépido personaje, para llegar a acercarse vertiginosamente a filmes como Misión imposible. El cual llega a ser demasiado Norteamericano, dejando esa faceta tan inglesa como algo inexistente, y al mismo tiempo, van volviendo al personaje como una persona más castiza, más comprometida dentro de sus misiones, cuando en realidad, James Bond trae de cabeza a M, por su falta de compromiso y rigidez a la hora de acatar órdenes. Sobre todo si en medio se tropieza con Ursula Andress, Britt Ekland, Barbara Bach, Izabella Scorupco, o Denise Richards.No es que diga que este James Bond en toda la película retozando, pero es una seña de identidad que aquí se olvidan, o la ponen como si fuera algo muy precipitado, sin nada de glamour. Eso sí, Monica Bellucci esta de infarto, y me da pena que no obtuviera una mayor presencia dentro del film.
Pero, no quiero decir que sea un mal film, es al contrario, es un buen film, ausente de la caracterización principal de James Bond. El cual tiene un principio de infarto, dentro de la capital Mexicana, y mezclado entre el numeroso público que asistía al carnaval del día de los muertos. Los escenarios, donde el agente se mezcla entre la multitud, disfrazado y muy bien acompañado, hará que te metas dentro de la historia en un primer instante. Aquí es donde el agente 007, pisa fuerte con unos planos de exteriores magníficos, dignos de lo mejor que han podido recrear dentro de la saga últimamente. Pero que poco a poco se irán diluyendo, como un azucarillo en un café bien caliente, sobre todo a la hora de ir presentando a los personajes, que acompañan a james Bond en esta nueva aventura, como Franz Oberhauser, interpretado por el actor Christoph Waltz, un actor con mucho registro, que desgraciadamente, solo le he visto brillar bajo las ordenes de Quentin Tarantino, de ahí sus dos premios por la academia, y que ni tan siquiera el maestro Polanski supo aprovechar dentro del film "Carnage". Sam Mendes tampoco anda fino y deja una interpretación, con un personaje excéntrico, un actor que sabría cómo resaltarlo, en una actuación plana y sin ningún aliciente que puedan definir al propio actor.
He de señalar una de las escenas donde james Bond hace gala del uso de su coche, por las calles de roma, hasta ir a parar al rio Tíber. Una carrera entre un Aston Martin DB-10 y un Jaguar C-X75, los cuales hacen una de las escenas más arriesgadas de la película, creo que ni el final llega a ser tan espectacular como la carrera que se pegan estos dos vehículos.
Más bien, el final llega a dejar el film como algo muy superficial, nada creíble, y la promesa de que la aventura numero 25 repita con uno de sus malvados. Eso sí, ¿Daniel Graig habrá cerrado definitivamente su puerta?
Nota. - 7/10.
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