La prensa de Londres se movilizara al rededor de la arqueóloga Edelgase por el posible hallazgo de la cabeza de la Medusa. Todo parece normal hasta que el inspector de policía se presenta en casa de Dylan Dog pidiéndole ayuda. Hasta quie se expone en el museo donde Dylan entrara en contacto con Edelgase. Una mujer muy extraña que no dejara de usar una singulares gafas de sol. Entre su relatos y unos nuevos asesinatos un tanto peculiares (petrificados) harán pensar que Edelagase sea una heredera de la mítica Medusa.
Bruno Brindisi hace un trabajo estupendo al dibujo, sobretodo maneja a la perfección las caras y los gestos. Pero también tiene algún fallo, en alguna viñeta donde salen varios personajes pierde un poco el sentido de la proporcionalidad. Paola pondrá una marcha muy buena en el guión, haciendo una historia muy dinámica sin perderse ni meter mucha paja. La pequeña historia sobre la maldición de la Medusa sera un punto que me ha gustado mucho, ya que esclarece en si y no empalaga la historia.
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